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Carne de Psiquiatra -Trastorno Bipolar

Absentismo vital

Absentismo vital

Suena un despertador.
No, no es para mí.
No estoy.
Que no, que no estoy.
Que no insistan, ya está decidido.
No es una decisión, es un mandato de mi cuerpo.

Hoy he decidido que no estoy en este mundo.
La cama es mi burbuja.
Me sumerjo en ella, aquí estoy a salvo.
Tengo mucho sueño, desaparezco entre las capas.

Me echarán de menos en el trabajo.
Me da igual, yo no estoy en este mundo,
Soy invisible,
Ellos tampoco me verán.

Hoy he decidido que no existo.
Que nadie pregunte por mí,
No esperen que atienda al teléfono.

Me llaman otra vez.
Abro un ojo.
Reconozco el número, llaman del trabajo.
Mi jefe tampoco existe, no le he llamado, no podía hacerlo.
Contesto con un monosílabo, digo "fiebre", digo lo que sea.
No estoy.

Todo pasa,
Mañana volveré al reino de los vivos.

Es sólo un día, no es la primera vez y lo sé.
El cuerpo pide desconectar
Dejar de trabajar la realidad
Descansar mentalmente
No puedes ignorarlo
Debes dar al cuerpo lo que te pide

Desconexión
Nada
Depresión

Esto ha llegado a sucederme, tal como lo cuento ahora.

*** 

3 comentarios

pau -

Tengo en el trabajo al hijo de un gran amigo, al que hace muchos años le diagnosticaron esclerosis múltiple... la peor que se puede tener.
Tan solo puede venir dos días a la semana y no siempre.
Puedes imaginarte. Mi socio y yo nos lo pasamos fatal, pero mi amigo me confiesa que su hijo se pasa la semana pensando en estos días.
Eso nos satisface horrores.
Ya ves.
Así y todo, a mi me va a costar la salud... pero el día que falte no sé si lo podré superar.
Que le vamos a hacer. La vida, supongo que hay que tomarsela como viene... No hay más de lo que hay.

Es bueno lo que haces, dices que no es terapia pero creo que sirve... y lo haces divinamente.

Carne de Psiquiatra -

Tú lo has dicho, eres el jefe, jaja. Si se te pegan las sábanas, nadie te dice nada.
Lo que cuento en este post no tiene que ver con la pereza, o con el dormirse un día, era algo mucho peor.
A mí llegaron a despedirme. Creía que la cosa no era para una baja, pero esto me sucedía a menudo. Desconocía mucho de la enfermedad, y no entendía por qué me pasaba.
Ese día no quería vivir, ese día tenía una depresión de un día. Quería morir pero mi suicidio consistía en no moverme de la cama. No existir, no podía vivir.
Mi psiquiatra me llevaba mal, otro me hubiese ayudado.
Mala suerte, Game Over.

pau -

Luego me cuentas como se lo toma tu jefe.
A mi me pasa a menudo, pero al poco recuerdo que yo soy el jefe.
Ya me diras!
Me ducho, me visto... y cagando leches... Y cagandome en el mundo, el sistema... y la madre que me parió.
Después resulta que no había para tanto.