OPTICA
Un día dije que hablaríamos de clichés, y este día es tan bueno como cualquier otro. El único título que creo acierta con la cuestión es, desde el punto de vista de un bipolar:
ENCANTADORAMENTE INSOPORTABLES
Y desde el punto de vista de la familia:
INSOPORTABLEMENTE ENCANTADORES
Es cuestión de óptica, como todo.
El bipolar tipo, el cliché, por lo que recuerdo en estos momentos, dice que somos:
Sensibles
Creativos
Empáticos
Generosos
Simpáticos
"Buena gente"
Lúcidos
Muy inteligentes
“Sex machine”
Buenos en lo que hacemos & Perfeccionistas
Preocupados por los demás: tareas de voluntariado, política…
La leche, vamos. Deberían poner en la sección de clasificados de “la Vanguardia” un SE REQUIERE BIPOLAR para cualquier trabajo, que lo hacemos excelentemente, en tiempo récord, y con dedicación absoluta, como si nos fuese la vida en ello. Y todo el mundo debería tener un "affair" con un bipolar, una experiencia única.
Sé del caso de una no-bipolar absolutamente atrapada por el "encanto bipolar" de su marido, segundo marido, y el primero también lo fue, y sus amigos también son bipolares en su mayoría. Dice sencillamente que son -somos- gente especial, y se rodea de cuantos bipolares puede. Es algo exagerado, quizá, pero así me lo han contado.
El “encanto bipolar”, del que ya he hablado. Ser una persona “con gancho”, con algo que aportar a cualquier evento. Hay que experimentarlo, porque consiste es una especie de halo que te envuelve, demasiado intangible para expresarlo con simples palabras. El caso es que dicen que dejamos huella, no pasamos desapercibidos.
Todo esto resulta hasta halagador, por supuesto. Y he escuchado a algún bipolar que lúcidamente (siempre esa lucidez) afirma estar orgulloso de su condición, por poseer alguna de estas cualidades. Esto suele suceder en hipomanía, porque cuando te montas en la montaña rusa sólo puedes maldecir.
Ahora viene lo que no nos gusta, pero es lo que hay, extraído de testimonios reales.
La enfermedad, a nuestro pesar, nos vuelve (más bien en manía o mixto):
Egocéntricos
Irritables
Prepotentes
Caprichosos
"Pesados" sexualmente
Todo para YA
Demasiado generosos (regalos para todo el mundo)
Autistas (en depresión)
"Sin límite"
Decimos cosas sin pensar, de las que hieren. Y son cosas que si se perdonan después, cuando vuelves a ser tú, has tenido suerte. Porque no siempre es así, y es cuando vienen los divorcios.
Que nadie se interponga en nuestros planes (hipo)maníacos, que lo mandamos a freír espárragos bien pronto. (Discusiones).
O estar inestable, no saber con qué pie te vas a levantar, si con el de la angustia o el de la depresión o el del suicidio, y volver locos a los demás, que supongo se dan cuenta que el que se encuentra mal eres tú. El caso es que les resultas insoportable, por muchas razones, una es que a la gente le gusta hacer planes y no pueden contar contigo, porque ni tú mismo puedes contar con tu humor. Culpa no la tiene nadie, pero el mal rollo, la mala onda, las malas caras, están asegurados. Lo que revierte negativamente en el ánimo del bipolar, dejándole peor de lo que estaba. Esto sucede a diario y parece no tener solución en las familias que conozco, el bipolar se siente completamente incomprendido.
Puestos a elegir, si es que reúno alguno de los requisitos antes mencionados, me quedo con el del encanto. Y si es producto de una enfermedad, bienvenido sea. El caso es que algo debo tener, algo que me ha permitido (ver hitos en un post anterior) relacionarme con muchas personas, aunque mis amigos se cuentan con los dedos de una mano, como debe ser. Y la empatía, y la extrema sensibilidad, que considero regalos, no dones. Aunque a veces una desearía tener una coraza emocional, porque la sensación de desnudo es frecuente.
Y por supuesto, también me han dicho que soy insoportable y me han llegado a colgar el teléfono, cuando una está en episodio borde (mixto, maníaco), pues a borde no nos gana nadie tampoco.
Un bipolar necesita relacionarse. Porque su enfermedad a veces se lo impide: la depresión te convierte en un caracol con concha blindada. Cuando se pasan épocas de eutimia o hipomanía, tras una depresión, la necesidad es imperiosa.
Todo esto evidentemente bajo mi punto de vista, ya sabemos que cada bipolar es un mundo, como cada persona, ni más ni menos.
Si esto lo lee algún bipolar, le invito a que engrose las listas-cliché, es muy curioso que la enfermedad nos hermane en pequeños detalles que la gente atribuye a la personalidad, cuando en realidad pueden ser producto de la enfermedad y los hemos hecho nuestros. ¿Creeis que algo de esto es genético e inalterable? O por el contrario, si remitimos, ¿dejaremos de ser así?
Y para los no-bipolares, aclarar que todo esto es fifty-realidad fifty-mito. Ya se discutió sobre el tema en el post sobre los famosos: la bipolaridad NO nos proporciona estas cualidades a todos, y tampoco hay que tenerlas todas, sucede lo mismo con las listas de síntomas.
. . . .
P.D. Coclicó, espero tu comentario, no te cortes querida ;)
Imagen: el ojo de "Blade Runner" (Ridley Scott, 1982)
ENCANTADORAMENTE INSOPORTABLES
Y desde el punto de vista de la familia:
INSOPORTABLEMENTE ENCANTADORES
Es cuestión de óptica, como todo.
El bipolar tipo, el cliché, por lo que recuerdo en estos momentos, dice que somos:
Sensibles
Creativos
Empáticos
Generosos
Simpáticos
"Buena gente"
Lúcidos
Muy inteligentes
“Sex machine”
Buenos en lo que hacemos & Perfeccionistas
Preocupados por los demás: tareas de voluntariado, política…
La leche, vamos. Deberían poner en la sección de clasificados de “la Vanguardia” un SE REQUIERE BIPOLAR para cualquier trabajo, que lo hacemos excelentemente, en tiempo récord, y con dedicación absoluta, como si nos fuese la vida en ello. Y todo el mundo debería tener un "affair" con un bipolar, una experiencia única.
Sé del caso de una no-bipolar absolutamente atrapada por el "encanto bipolar" de su marido, segundo marido, y el primero también lo fue, y sus amigos también son bipolares en su mayoría. Dice sencillamente que son -somos- gente especial, y se rodea de cuantos bipolares puede. Es algo exagerado, quizá, pero así me lo han contado.
El “encanto bipolar”, del que ya he hablado. Ser una persona “con gancho”, con algo que aportar a cualquier evento. Hay que experimentarlo, porque consiste es una especie de halo que te envuelve, demasiado intangible para expresarlo con simples palabras. El caso es que dicen que dejamos huella, no pasamos desapercibidos.
Todo esto resulta hasta halagador, por supuesto. Y he escuchado a algún bipolar que lúcidamente (siempre esa lucidez) afirma estar orgulloso de su condición, por poseer alguna de estas cualidades. Esto suele suceder en hipomanía, porque cuando te montas en la montaña rusa sólo puedes maldecir.
Ahora viene lo que no nos gusta, pero es lo que hay, extraído de testimonios reales.
La enfermedad, a nuestro pesar, nos vuelve (más bien en manía o mixto):
Egocéntricos
Irritables
Prepotentes
Caprichosos
"Pesados" sexualmente
Todo para YA
Demasiado generosos (regalos para todo el mundo)
Autistas (en depresión)
"Sin límite"
Decimos cosas sin pensar, de las que hieren. Y son cosas que si se perdonan después, cuando vuelves a ser tú, has tenido suerte. Porque no siempre es así, y es cuando vienen los divorcios.
Que nadie se interponga en nuestros planes (hipo)maníacos, que lo mandamos a freír espárragos bien pronto. (Discusiones).
O estar inestable, no saber con qué pie te vas a levantar, si con el de la angustia o el de la depresión o el del suicidio, y volver locos a los demás, que supongo se dan cuenta que el que se encuentra mal eres tú. El caso es que les resultas insoportable, por muchas razones, una es que a la gente le gusta hacer planes y no pueden contar contigo, porque ni tú mismo puedes contar con tu humor. Culpa no la tiene nadie, pero el mal rollo, la mala onda, las malas caras, están asegurados. Lo que revierte negativamente en el ánimo del bipolar, dejándole peor de lo que estaba. Esto sucede a diario y parece no tener solución en las familias que conozco, el bipolar se siente completamente incomprendido.
Puestos a elegir, si es que reúno alguno de los requisitos antes mencionados, me quedo con el del encanto. Y si es producto de una enfermedad, bienvenido sea. El caso es que algo debo tener, algo que me ha permitido (ver hitos en un post anterior) relacionarme con muchas personas, aunque mis amigos se cuentan con los dedos de una mano, como debe ser. Y la empatía, y la extrema sensibilidad, que considero regalos, no dones. Aunque a veces una desearía tener una coraza emocional, porque la sensación de desnudo es frecuente.
Y por supuesto, también me han dicho que soy insoportable y me han llegado a colgar el teléfono, cuando una está en episodio borde (mixto, maníaco), pues a borde no nos gana nadie tampoco.
Un bipolar necesita relacionarse. Porque su enfermedad a veces se lo impide: la depresión te convierte en un caracol con concha blindada. Cuando se pasan épocas de eutimia o hipomanía, tras una depresión, la necesidad es imperiosa.
Todo esto evidentemente bajo mi punto de vista, ya sabemos que cada bipolar es un mundo, como cada persona, ni más ni menos.
Si esto lo lee algún bipolar, le invito a que engrose las listas-cliché, es muy curioso que la enfermedad nos hermane en pequeños detalles que la gente atribuye a la personalidad, cuando en realidad pueden ser producto de la enfermedad y los hemos hecho nuestros. ¿Creeis que algo de esto es genético e inalterable? O por el contrario, si remitimos, ¿dejaremos de ser así?
Y para los no-bipolares, aclarar que todo esto es fifty-realidad fifty-mito. Ya se discutió sobre el tema en el post sobre los famosos: la bipolaridad NO nos proporciona estas cualidades a todos, y tampoco hay que tenerlas todas, sucede lo mismo con las listas de síntomas.
. . . .
P.D. Coclicó, espero tu comentario, no te cortes querida ;)
Imagen: el ojo de "Blade Runner" (Ridley Scott, 1982)
10 comentarios
Eduardo -
Sandy -
Consuelo -
LOS BIPOLARES NO SOMOS ENFERMOS MENTALES
rocio -
como una pequeña rata, blue me gustaria poder comunicarme contigo me faltaba decir que soy bipolar
Susie -
Mirta -
coclicó -
En terapia se parte de que los bipos son exigentes, intolerantes, con un juez interior implacable que es el núcleo duro de la enfermedad.
Suele considerarse que el TB es una enfermedad biológica en que los neurotrasmisores se vuelven locos. Yo estoy con las teorías clásicas: unos rasgos de personalidad destruyen el equilibrio bioquímico del cerebro, de por si frágil, en individuos predispuestos, en familias en las que la patología ha saltado durante generaciones.
si hay un cliché aplicable a los bipos que conozco es que creen que al tragar pastillas como pavos y guardar cierta "higiene" en su vida mejorarán. Desconocen todas las medidas psicoterapeúticas y por supuesto, que la salida está en el cambio interior.
Carne, te he dado mucho la tabarra con estos planteamientos pero cada vez estoy más convencida de ellos.
Son las multinacionales las que están interesadas en la versión de que las pastillas curan, cuando hay otras armas terapeúticas más valiosas.
me pone muy nerviosa que estos clichés estén presentes en los diálogos de bipolares, me parece que bloquean la capacidad crítica y la búsqueda de una solución.
Solo hay una característica cierta, que no cliché, válida para la mayoría de los enfermos mentales: desarrollan más la empatía y la capacidad de comprensión. aunque no sé si es del todo cierta: hay gente que se embota y embrutece.
Carne de Psiquiatra -
Pues sí, me cago en todo, y voy persiguiendo a mi psiquiatra para que me ajuste la pauta, hoy mismo, sin ir más lejos.
Tantranet (sugerente nick): estoy completamente de acuerdo contigo. Bienvenido a este blog, espero poder recibir más comentarios lúcidos tuyos.
Arriba los neuróticos.
Tantranet -
Alberto -