Callando como putas
Llama mi amigo. ¿Cómo estoy? Intento recuperar de mi memoria alguna de las fórmulas de cortesía pero ni eso me sale. Me confiesa que esta semana anda bajo y que hoy se ha levantado a las 18 h. Iba a callarme como una puta pero me sale un sincero: anda, qué casualidad, yo también. Estamos sincronizados. Todavía hace sol en Madrid y dicen que el de otoño es más cegador, pero como que ya nos importa un carajo.
Hasta los cojones. Los próximos posts tendrán títulos raros pero el título real será ese.
Hemos quedado mañana, a ver si se cumple la vieja ecuación dos depres = dos que se animan.
Llamo a dos amigos, caen las hojas por doquier. Entre nosotros no callamos, fuera... pues "sí, bien, me encuentro bien". Es lo que hay que decir a la familia mientras rechinas los dientes y sobrevives, sabes que va a pasar y ya sabes incluso cómo, así que mejor callamos porque esto es como una gastroenteritis, crónica por supuesto. ¿Dónde estaba la ducha, que no me acuerdo?
Eso de que estás bien lo dices cuando no estás en los dos bajones reglamentarios al día en los que te enroscas bajo el edredón y dejas pasar las llamadas hasta que te ves con ánimo de devolverlas. Me he buscado compañía en los últimos libros que hay por casa. Mereció un quinto traslado para uno de ellos, menos mal y menos mal que puedo evadirme con eso.
Putas ganas de conectarme, de escribir. Prefiero cocinar algo y al menos, comer. El resto, leer y dormir.
Empezamos bien el otoño.
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3 comentarios
vemago -
Estoy de acuedo contigo en que la mayoría de las depresiones tienen un componente endógeno y otro exógeno; aunque en nuestro caso, lo que caracteriza a los bipolares, es el componente endógeno; además no somos inmunes a las circunstancias exógenas que pueden provocar un trastorno depresivo, por ejemplo la propia condición de padecer una "enfermedad mental" o como efecto secundario del tratamiento de la condición bipolar.
La mayoría de los trastornos depresivos tienen una recuperación progresiva, bien sea espontánea o con medicación; nuestra enfermedad posiblemente sea la excepción: cicladores ultrarápidos, mania disfórica,... De todas formas, la buena compañia pude que sea mejor antidresivo que los fármacos.
De lo que no me cabe duda, aunque digas que "hoy no me puedo levantar" (primer gran éxito de Mecano), es que aunque estés bajo de ánimo; no tienes una depresión digna de ser llamada así, sino no te hubieras puesto al ordenador para expresar tu opinión sobre un comentario.
Te deseo que esta semana, al igual que el resto de tu vida, te encuentres bien la mayor parte del tiempo.
Cordialmente. Venmago.
Carne de Psiquiatra -
A modo de anédota, se juntaron dos depres pero uno de ellos ya no lo estaba (recuperación espontánea), y el otro se duchó para la ocasión, y se recuperó espontáneamente al día siguiente.
En mi primer ingreso, menudas juergas con los depres...
Ya veremos cómo andamos esta semana en este negocio del hoy estoy bien - hoy estoy flojo - hoy no me puedo levantar.
venmago -
Dices que "hasta los cojones". ¿Pero de qué? Es difícil saber cuando se tiene un supuesto trastorno denominado bipolar, diferenciar hasta que punto, nuestro "hasta los cojones" es endógeno o exógeno.Alguna gente con la que trato, dependiendo de su situación actual en la que se encuentra está "hasta..." (p.e. en el trabajo) o bien (tomando una cañita), en menos de una hora. Es mejor no recrearnos en nuestras "miserias".
No estás tan mal si eres capaz de llamar a tus amigos y además eres afortunada por tenerlos y conservarlos.
No es del todo cierto que dos depres se animen, a lo sumo puenden jugar a: "Mis desgracias son mayores que las tuyas"; eso consuela pero no ayuda demasiado
Un abrazo y sigue escribiéndonos. Venmago.