Vive la différence
Despierto demasiado pronto, y ayer se me olvidó comprar café, un pequeño desastre de los míos, habituales, pues tampoco me queda tabaco rubio y tengo el paquete de negro, el "reserva", como la gasolina de los coches. Pasa por no querer faltar a un compromiso, y luego caer desmoronada.
Mientras preparaba la cafetera con un descafeinado no sin resignación, reparé en que me moría de hambre, pero no de una tostada, sino de comida de verdad. Héme aquí de pronto cocinando pasta. Menos mal que no ha sido una paella, el antojo. El caso es que he comido, lo que se llama un atracón porque es a deshoras, y ahora estoy tomando un cafelito no solo, sino de postre.
Cosas que no deberían suceder, cosas que provocan las pastillas tantísimas veces.
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Leo comentarios que entran en posts antiguos. De nuevo, me topo con el "orgullo bipolar" del "cómo me gusta ser así", y sigo sin estar de acuerdo. Si alguien inventara un "paraíso bipolar", no entraría. No porque me crea mejor que mis semejantes, no es eso, es que creo que soy gente y con ella debo permanecer. Aunque haga cosas extravagantes. He conocido a gente muy extraña que no tiene nada diagnosticado. Simplemente, son raritos, y son gente, y por eso se dice que "hay de todo en la viña del Señor".
El "Vive la différence" lo dicen los franceses para referirse a la maravilla de que existan las mujeres, tengo entendido. Claro que es extrapolable a toda diferencia entre individuos, hoy día. Pero para mí no hay júbilo alguno en "lo nuestro", sigo sin ver el orgullo de ser diferente a los demás, de tener que cuidarse con tanta medicación, de quizá haber tenido que ser ingresado o pasar por una TEC. Eso es un drama. Pero si sólo recuerdas las hipomanías, la película no deja de ser una comedia trágica.
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Llevo dos días consecutivos de ducha y estoy descubriendo sus bondades. Me siento mejor persona porque temo un poco menos el salir a la calle, relacionarme con mis semejantes, mi gente, con el temor a "oler", a la humanidad que respiro cuando pongo la lavadora. Miedo me da el otoño que llega, cuando sudas menos. No me valen los argumentos de estar más fresquito y eso, lo que quiero es estar en predisposición más sociable.
No me importa ser diferente, porque lo soy, pero quiero no demostrarlo, lo dije ya en su día, como un pavo real. Quiero ducharme, vestirme, ya no digo con discreción, digo a mi estilo sea cual sea, que para ser cuarentona y gorda a veces es extremado, pero hay que hacer vida social y relacionarse la gente, la gente que soy, y ese es mi intento actual.
Por mí, y por ellos, para que siga habiendo de todo en "la viña del Señor".
Aunque siga sintiéndome fatal por haber comido, muy mala forma de empezar el día porque la digestión es una perfecta excusa para no ducharse ahora, por ejemplo... se acabó el autosermón de hoy.
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P.D. Los encontré juntos por casualidad: http://www.youtube.com/watch?v=tPGTdDohGl4
Estoy buscando la traducción de una letra precisamente sobre algo que me recordó al "paraíso bipolar".
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Imagen: http://www.artslant.com/global/artists/show/49579-lance-carlson
2 comentarios
Clarice -
Guadiana -
Y ¿qué decirte por esos 42 tacos? Pues no se me ocurre nada mejor que dejarte unas cuantas frases para la reflexión:
1) ¿Cuándo será el fin del mundo? Para mí, el día que yo muera.
2) ¡Ojalá vivas todos los días de tu vida!.
3) No hay peor fracaso que el no haberlo intentado.
Y las clásicas:
- Hoy es el primer día del resto de tu vida, y
- Carpe diem quam minimum credula postero.
Pues sí, Blue, hoy/ahora/ya/este preciso instante... es todo lo que tenemos. ¡Y NO HAY MÁS! Porque el mañana no existe; porque cuando estemos en él ya no será mañana, sino hoy; porque si seguimos pensando siempre en el mañana, dejando todo para mañana, nuestra vida se convertirá en un eterno pasado...