Blogia
Carne de Psiquiatra -Trastorno Bipolar

La cara B

La cara B

La cara B, así nombró un amigo a lo que nos queda hasta la muerte, de forma original a la vez que certera. Cercanos o pasados los 40, ya estamos ahí, en el tramo que nos acerca a la muerte, y da que pensar.

Hablo con gente más joven que yo, y me doy perfecta cuenta. Están con su primera o segunda pareja o novio, tienen ilusiones, quieren tener hijos incluso. Empiezan a trabajar en lo que les gusta o para lo que fueron preparados, están llenando un currículo vacío después de la titulación.

Me sorprendo y no me sorprendo cuando mi respuesta remite a “hace 20 años”, “hace 15 años”, “hace 10 años”. Mínimo diez años me separan de esas conversaciones. He pasado ya por todo esto, puedo decirlo orgullosa, porque ya estoy en la cara B de mi vida.

Es tiempo de tener claro que no vas a volver a hacer o repetir lo ya hecho, que ya no queda tanta vida para realizar lo que sí tuviste como sueño. No sabemos cuánto nos queda, pero ya empezamos a asistir a algún entierro de gente de nuestra edad. Somos adultos, somos “de mediana edad”, ni jóvenes ni seniles. Sabemos que en diez años quizá algún achaque nos impida para algo aunque ahí está gente de 50 como una rosa, y de 60 que se jubilan y se dedican a... viajar, o cultivar un huerto, por ejemplo.

Por eso yo al cumplir años, como escribí en un post de “cumpleaños” el pasado octubre, respondo al “ojalá los tuviese” por un “ojalá llegue yo a los tuyos”. Cuando alguien mayor quiere retroceder, no sé si es porque tiene demasiado claro ya lo de la cara B y por tanto miedo al final, o porque cuando se empezó a dar cuenta de que la pisaba, no lo valoró para decidir si su vida tenía el rumbo que la hacía disfrutar el día a día de algo parecido a la felicidad. A veces es tarde para dar marcha atrás.

Todavía no tenía conciencia de estar en la cara B cuando mi ex y yo nos separamos. Lo hicimos conscientes de que merecíamos una segunda oportunidad y no reconciliarnos para llegar al mismo punto años después, quizá tarde ya para eso, quizá con hijos que lo hiciesen más difícil para ambos. Tomamos una buena decisión, los dos pensábamos con la cabeza. Sólo se vive una vez, y a los 30 es buena edad para buscar otro camino que no ofrece nunca garantías, pero sí el de no arrepentirse años después de haberse acomodado en una situación que no satisfacía expectativas vitales. Ya no éramos pareja, no había que darle más vueltas sino buscar soluciones.

Hoy puedo decir que soy una single pero eso es producto de mi época. Algo nuevo, y difícil cómo no para una mujer. Se sigue tolerando socialmente un hombre sin pareja aunque haya cumplido los 40, en cambio una mujer sin pareja a esa edad es una desgraciada, esa es la mentalidad imperante, que tan sólo cambia el vocablo despectivo “solterona” por el fashion y ahora correcto, aunque no hispano, “single”. Cuántas veces me habrán dicho que tenga un perro, por no estar sola. Y qué pasa si estoy sola, es como quiero estar, y sin ataduras pues un perro tiene su esclavitud y en eso pienso, no en que dan mucho cariño, etc. Yo apuesto por pelearme en el reino de las personas, y ya veremos si alguna puede darme cariño, cosa que no voy a delegar en un animal.

El rollo single es raro, es freak, es inconformista. Gente que en su día no se conformó, que buscó otro camino. Quizá no tengamos pareja, pero hemos cultivado otras cosas, nuestra propia vida, nuestros intereses. Quizá busquemos pareja, pero quizá nos hayamos acomodado también en nuestra independencia. Cuando echo un vistazo a mi armario, sé que ya no podría compartirlo. Otros han vuelto a hacerlo en un proceso de adaptación a una segunda o tercera pareja, yo misma, pero cada vez es más difícil renunciar a territorio.

Echo un vistazo a los matrimonios con hijos. Muchos dejaron de ser pareja para convertirse en padres, y siguen conviviendo por esta razón, poderosa pero a costa de su propia satisfacción vital. Seriedad, responsabilidad, y ser consecuente con eso, dormir con alguien que ya no es tu pareja. Y no digo que no haya matrimonios o parejas de hecho felices, no. Sólo se quejan los que no lo son, y no siempre lo hacen a no ser que seas íntimo, o bien un perfecto desconocido por Internet.

Muchos amigos cibernéticos desconectan a la hora de cenar, bien porque hayan de cocinarla, bien porque hay gente en la mesa esperando. Es cuando te planteas que eres libre para cenar cuando tengas hambre y no a la hora de siempre. Que podrías estar por el centro, ir al cine, comer algo fuera, y volver habiendo hecho algo que a ti te gustaba, como ver la peli a la que ninguno de tus amigos se apuntaba. Libre, para hacerlo o no.

Libre para decidir qué quieres, ahora que estás en la cara B. Haz hoy mismo algo de lo que tengas pendiente en tus deseos, pues mañana puede ser tarde ya. Nada te impide hacerlo si eres single, sólo salud y dinero.

El dicho es: “hoy es el primer día del resto de tu vida”. Lo que hay que hacer: “a la vejez, viruelas”.

El otro día recibí un power point no del todo cursi. Su mensaje era que sin amor nada puede hacerse. No es papel mojado del todo para un single, que a veces desearía sentir eso, pues en su día muchos lo tuvimos. Pero todos hemos de seguir con “lo que hay”, y no habrá amor, pero sí libertad, y hay que jugar con las cartas que se tienen en la mano, cada vez menos, en la cara B.

P.D. Mi amigo me recuerda que es necesario tener los 40 cumplidos para “ingresar” en el “Club de la cara B”. No le he respondido “ojalá llegue”.

***

2 comentarios

Carne de Psiquiatra -

En este post no se menciona bipolar para nada. Claro que me han ocurrido sucesos, mi vida ha sido intensa, no puedo quejarme salvo de los años en los que mi tratamiento psiquiátrico fue incorrecto y con ello, mis pifias inevitables.
Y los singles que alguna vez tuvimos pareja, aspiramos a esa segunda o quinta oportunidad. Pero ya no podemos retroceder a la edad en la que estas cosas son más fáciles.
Contesto si tengo algo que decir, no por norma, y a veces, lo hago en privado. Aquí tienes espacio para decir lo que piensas y no me veo en obligación de contestar, yo doy una opinión y tú la tuya, si hay debate bien, si no, también, pero no tengo por qué estar en el debate si dos o más lectores hablan del tema.
Lo de maníaco-depresivo ya no se usa, término obsoleto, salvo los periodistas que patinan mucho. He de escribir sobre eso también.
Yo también ando espesa, la toma de la mañana ataca todavía.

Nano -

Pues no sé que decirte...cara B, cara A...muerte, yo diria más bien que la vida es un vinilo con diferentes pistas, la aguja va pasando de una a otra y cuando quieras puedes volver al principio...tal vez un día cuando te ocurra algún suceso más importante que la Bipolaridad...no te ofendas, pero me parece que has hecho una montaña de un grano de arena llamado Bipolaridad... Enfermedad Maniaco-Depresiva suena más duro pero no deja de ser una pequeña espina que un ser humano debería despojarse sin ningún problema...no sé, hay muchas cosas peores y muchas cosas más importantes...eres una single por decisión, pero algo me dice en mi interior que en el fondo muy en el fondo ansias volver a sentir amor, una pareja...no sé...todos los singles que he conocido (Incluido a mi)...en el fondo esperamos algo más de la vida.
Bueno, estoy un poco espeso hoy...un beso Blue.
Nano.-
(Al que no contestas nunca...pero me da un poco igual...para singles yo y mi vinilo, de pista a pista)