Polònia, días 1-2: indisposición
3,5 horas de sueño. Recuerdos del fin de semana de permiso que me dieron en el primer ingreso, por qué esos días de agosto...
Un colchón raro, sólo un lado de la cama en una cama de 90, y dolor de espalda al levantar. Recuerdo de nuevo ese fantasma mío de 2004 en la habitación, y se me escapa una lágrima cuando se lo cuento a Madre. Paseo matutino por el barrio del brazo de mi madre porque apenas veo al salir. Hago alguna compra para mi armario de mujer gordita. Después de comer, caigo en la cama y hago siesta por KO técnico. Despierto acompañada de un herpes labial. Antes de cenar, ataque de ansiedad: cancelado el primer compromiso con las amigas sector cochecito niño. Película en TV y a la cama, nerviosa: las pastillas no me duermen.
. . .
6,5 horas de sueño. Zombi desde las 8.30, siento que el cuerpo me tiembla. Debo dormir más, estoy insostenible. Esta noche me gustaría juntarme con ellas. Se me parte el cráneo y veo borroso. Esta mañana me apetece pero no sé si podré ir a la playa. Madre está mosqueada conmigo porque los planes no están claros en absoluto.
Mierda. Ataca la impotencia. Se espera de mí, y yo no puedo responder. Y sé que tendrán que llevarme a donde sea, que mis piernas no podrán ir solas. Y llevarme del brazo también: miro sin ver, veo sin mirar, escribo porque lo sé hacer con los ojos cerrados y por eso Madre no entiende. Yo tampoco lo entendería, hay que estar majara.
Escrito a las 11.52.
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2 comentarios
Carne de Psiquiatra -
Poco a poco me voy haciendo a todo, tengo un conflicto entre los recuerdos a sepultar=aceptar y el amor a determinadas personas, y lugares.
Estoy bien, voy estando mejor, a medida que duermo mejor.
Un saludo
ismael -