Cuadernos de Barcelona, lunes 27 de julio: reciclando papel
Para cenar en buena compañía de S. Y Kidam: Mutabal, esa crema de berenjenas asadas con salsa de sésamo, y las hojas de parra rellenas de arroz [Dolma]. Me chupaba los dedos. Me pirran los restaurantes [griegos, turcos, libaneses... mediterráneos. En este caso...] sirios.
Hoy sí empiezo con la maleta. He aprendido que lo que no he usado en Barcelona, quizá coincida con lo que tampoco me pondré allí [Madrid]. Eso se va ya al baúl, que no quiero prisas de última hora.
Miro hacia arriba. Aquí hay una estantería llena de archivadores (...). Mi objetivo de hoy es deshacerme de estos papeles, unas quince cajas, y no sé si podré. Kidam, experto en deshacerse de lo inútil, se ha ofrecido a ayudarme, lo mismo que ayer ayudó a S. A llevarse un trasto de utilidad que ya no uso. Kidam ha conseguido minimizar "su vida": ahora sólo posee cuatro libros de arte, tras hacerse partidario activo del bookcrossing. Pasó todos sus discos a mp3 y los conserva en un disco duro. Borra las películas a medida que las ve, y si conserva alguna, lo hace en otro disco multimedia. Si hace una mudanza, los libros y discos externos le ocupan... nada. Le admiro muchísimo.
Quise escanear esos apuntes hace años. Nada de nada, ahí siguen. Señal de que ni siquiera les he dedicado ese tiempo, o de que no me he preocupado de saber cómo funciona ese equipo multifunción de Madre.
Esta noche será la última aquí. Me siento rara. Las dos próximas, en Madrid. A saber qué ocurrirá allí, donde vuelve a hacer calor. Y yo con los pies hinchados, todavía, sin poder caminar apenas. Joder con este tema, con perdón, porque es de los que te joden unas vacaciones.
A las 7.34 he conseguido poco: dejar dos archivadores semivacíos, y uno sin tocar. Ya sabía que no tendría lo que hay que tener para tirar los pocos conocimientos que deben estar archivados en neuronas que quizá hayan muerto ya. Quizá haya tenido la mala suerte de empezar por mis asignaturas favoritas. O por el shock de ver mi propia letra ahí en esquemas con autores que había olvidado, nombres que se me antojan nuevos, trabajos firmados por mí ¡Algo útil hice! Y textos, bastantes fotocopias, subrayados. Es fácil tirar fotocopias, eso sí. No todas... no, este trabajo no es nada grato. Y agradezco hacerlo sola, sí. Para quien tiene valor, fácil es tirarlo. Y eso buscaba, en efecto. Pero quizá todavía no estoy preparada. Quizá al no tener una casa definitiva, una descendencia que empuje a deshacerme de un pasado para preparar y construir un futuro, lo que hice hace 15 años siga teniendo demasiada vigencia [sentimental].
Creo que Madre ya ha despertado. Si no vuelve a contarme lo de Fernando Alonso de ayer, no me rayaré más.
Las nueve menos cuarto, agobiada por la agenda de hoy, llena de pequeñas gestiones y trabajo con esos archivadores malditos. (...) Con gusto, si pudiese conciliar el sueño, me volvía a la cama.
No parece difícil "estar bien" y me ha costado la friolera de cinco años ser capaz de abrir un armario y decir: esto "fuera" al reciclaje de trastos, esto me lo llevo, esto se queda aquí. Es increíble. No he estado bien para hacerlo hasta ahora. Y no se puede decir que lo esté, no del todo, no cuando pinché el sábado.
Hacía años que no estaba tan bien con Hermano. Esto también hay que celebrarlo.
Vuelvo al tajo... haré mis descansos, por supuesto, que ese trabajo satura mucho.
Revistas y panfletos de mi época de estudiante, que muestran mi nombre. Fui alguien en algún momento, y ahora a quién le importa. Ocupa espacio. (...)
Resulta [más] fácil tirar los apuntes de las asignaturas de segundo ciclo, sobre todo las que escogías porque los horarios te iban bien como único criterio. Tengo medio carro lleno de papel para reciclar, y he sacado muchas grapas y clips de esas carpetas. Una de las pocas asignaturas que me importa circula, sin embargo, sin archivar, en folios sueltos por todas partes, que voy recuperando. El Anciano Profesor murió dejando retazos de su sabiduría a generaciones enteras.
A pesar de haber cursado ciencias exactas hasta COU, luego estudié una carrera de humanidades. De polo a polo [bipolar hasta para eso]. La hereje. En fin, tarde para arrepentirse de lo que una es.
Pasan las horas, ya las 15.30, acabo de ver al Boss en Bilbao en las noticias. Entre papeles, he encontrado pautas antiguas, las que me marcaban la toma de antidepresivos y ansiolíticos, en la época de diagnósticos de depresión y ansiedad, de bipolar ni se hablaba, ni siquiera conocía la palabra, menos la enfermedad [diez años de demora en el diagnóstico].
Mañana a estas horas estaré haciendo la siesta en Madrid. Recta final en Barcelona, todo estrés, demasiada actividad, como siempre, (...) poco espacio libre, minúsculo, para transportar gran cosa a Málaga. Eso me tiene algo mala, y no es una sensación nueva: la mudanza a Madrid desde Barcelona fue de paquete en paquete desde aquí. Se complica la cosa porque... no me lo llevé todo. Y hay objetos que se salvan de la quema, los que sí me pertenecen, que quiero conmigo.
. . .
P.D. Vacié cinco o seis cajas. El martes fue un día frenético, hasta que me metí en el AVE destino Madrid: el blog vuelve cronológicamente al artículo del 31/07/2009. Y aquí doy carpetazo a esta serie de "Cuadernos de Barcelona" . Ha sido un experimento, publicar lo escrito allí en esas mini-vacaciones con dos semanas de retraso. Personalmente, celebro los logros allí conseguidos. Deseo que os haya gustado el relato estos diez días, o al menos, entretenido, mientras, espero, me hayáis conocido un poco mejor como bipolar y persona.
***
Imagen: http://gestiondocumentalparagentenormal.com/
2 comentarios
Sun -
...quizá lo que hice hace 15 años siga teniendo demasiada vigencia sentimental (sic, Blue)
Enhorabuena Blue porque al menos has conseguido enfrentarte a ello. Yo, en cambio, sigo sin poder acercarme a las cajas de la mudanza que se acumulan en un vergonzoso desorden desde hace ya casi dos años y amenazan con caérseme encima, literal y metafóricamente hablando.
Sun
Roberto -
Tú y yo somos, ante todo, personas...
Padecemos una enfermedad jodida que es el TB pero, somos y siempre seremos, ante todo, personas...
Sabes que cuentas con todo mi apoyo en este duro proceso de eliminar, reciclar o tirar documentos, libros y recuerdos varios del pasado... Este proceso es imprescindible si queremos que cosas positivas nuevas aparezcan y ocupen un lugar en nuestro presente...
Te quiero...